SANTO DOMINGO. Las empresas de telecomunicaciones del país demandaron de las autoridades contrarrestar los robos de cables para convertirlos en cobre, combustibles, baterías, equipos de transmisión de videos, que han arrojado pérdidas en el primer semestre del año por RD$53 millones. Así lo expusieron ante el Procurador General de la República, Radhamés Jiménez Peña; el jefe de la Policía, Rafael Guillermo Guzmán Fermín, y el presidente del Indotel, José Rafael Vargas; los presidentes de Codetel, Tricom, Orange y Viva, así como los fiscales del Distrito y de las provincias del país. Oscar Peña, presidente de Codetel, planteó que necesitan un refuerzo y un apoyo más fuerte y decidido, para tratar de resolver la problemática, porque las pérdidas se traducen en menos inversiones y afectaciones a cientos de miles de clientes.
"Y lo peor es que muchas veces vemos la venta de combustibles robados a la luz del día, en público, y que todos los que lo vemos sabemos el origen de ese combustible y sigue ahí y no se toman medidas".
Deploró que comunidades resulten afectadas, quedando sin comunicaciones, por las limitantes en las inversiones cuando se sufren esos robos. "Este año, debido a la crisis económica, debido a que las bandas están operando en una forma más organizada o que tal vez ha faltado alguna medida más energética o encontrar a esos cabecillas de las bandas, las pérdidas de la industria de las telecomunicaciones son más altas que nunca", se quejó.
Peña dijo que esas actuaciones delincuenciales constituyen un riesgo para la seguridad nacional, porque las bancas organizadas destinan los fondos ilícitos para otras actividades "y no podemos permitir que se siga operando sobre este manto de ilegalidad". Dijo que esto afecta fuertemente la inversión extranjera.
