Santo Domingo. Varias de las plantas procesadoras de agua, presuntamente clausuradas por las autoridades de Salud Pública, continuaban ayer operando, mientras otras a las que les exigieron algunos requisitos, que faltaban por completar, trataban afanosamente de cumplirlos.Yosmar Rossi, administrador de Agua Genuina, clausurada el lunes por inspectores de Salud Pública, negó que su planta resultara afectada con la medida y agregó: "Me pidieron algunos registros, me dieron 15 días y ya inicié el proceso".
En las mismas condiciones está la planta de agua Ozama, donde se dijo que los funcionarios que le visitaron sólo le exigieron cumplir con algunas normas de calidad y ya, al igual que las demás, están en proceso de cumplir.
"A nosotros no nos han cerrado, estamos trabajando y vamos a cumplir, se nos pidió que colocáramos una cortina y que mantuviéramos limpio el lugar, así como sacar unos registros en Salud Pública y ya mi hermano lo está sacando", dijo una joven que no quiso identificarse en la planta de agua Eliany.
Personas consultadas que son clientes fijos de estas plantas, como el caso de la señora Josefina Agramonte, dijeron que nunca se han enfermado, a pesar de tener mucho tiempo usándola.
La mayoría de las plantas "cerradas", es por falta de los registros que emite la propia Salud Pública y que cuyos dueños ignoraban que debían tenerlos y colocarlos en lugares visibles al público.
En el caso de Agua Aracena, ubicada en la Jacobo Majluta, Agua Brisel, Astral, Rey Mon, Estevez, entre otras, fueron advertidas por la venta al granel que está prohibido mediante resolución de Industria y Comercio. LEER COMPLETA
